Ulises Adame de León, homicida impune
Candidato del PRI al distrito federal 03 de Durango

 

Homicida, burlador de la ley por el poder gubernamental que detentaba, Fernando Ulises Adame de León, candidato priísta a la diputación federal por el distrito 03 del estado de Durango, es el vivo ejemplo de que para los tricolores, invariablemente primero son ellos, después ellos, siempre ellos…
Adame de León se convirtió en homicida bajo los influjos del alcohol, pues atropelló y mató al niño Francisco de León, de 11 años -hijo de su primo del mismo nombre- en San Juan de Guadalupe, hace tres años. Aun más, bajo los efectos etílicos y del poder, persiguió al menor y primo hermano de la víctima, testigo ocular del hecho, con la intención de dañarlo, según cuentan los vecinos.
Pero bajo la complicidad del gobernador Ángel Sergio Guerrero Mier, Adame de León se salvó de caer tras los barrotes penitenciarios, el caso está condenando al olvido en los archivos de la Agencia del Ministerio Público de Cuencamé, Durango.
Pese a su “gran” curricula como funcionario estatal, Ulises Adame de León dejó sumido en la quiebra total al campo duranguense, resultado contrario a la responsabilidad que tenía, siendo titular de la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural del estado de Durango; dependencia en la que ejerció el presupuesto con tintes clientelares y por ende, sin un plan de desarrollo integrador del campo.
Dos veces secretario de Desarrollo Rural, en este periodo de indolencia gubernamental de Guerrero Mier, Adame de León es diputado local con licencia, y ahora se apresta a ganar la diputación federal del distrito 03 que, aunque todavía no gana, le sirve ya para promoverse para la candidatura a la senaduría del año 2006.

Por Juan Monrreal López

 

Ciudad Lerdo, Durango.- Diputado local del estado de Durango por el distrito XII con asiento en esta localidad, Ulises Adame no tiene nada de que alardear. Avecindado en esta ciudad por órdenes del propio Guerrero Mier, burlador de la ley y del voto popular, fue incapaz de detener el éxodo del campo lerdense, primero como secretario del ramo y posteriormente como diputado local.
Sumidos en la miseria total, los campesinos de este municipio -por cierto la ciudad más antigua de la Laguna- considerado el cuarto en importancia por el monto de su recaudación en el estado, ya expulsó al 60 porciento de su población rural, según denunciaron los dirigentes cenecistas.
Siempre confundido por su ambición pública, Ulises Adame de León debe su inclusión política en el gabinete de Guerrero Mier a la recomendación directa de Eladio Ramírez López, dirigente nacional de la Confederación Nacional Campesina (CNC).
Ganadas las elecciones en el estado, allá por 1998 y después de pasar el tradicional besamanos de rendición de cuentas ante Ernesto Zedillo, Guerrero Mier aceptó a bordo del avión de retorno a la capital del estado la orden de Eladio Ramírez López, para incluir como secretario a este docente.
De hecho, la historia de Adame de León es apoderarse de los puestos de poder con todo el apoyo oficial, tal como se hizo de la dirección de la Universidad Autónoma Agraria Antonio Narro (UAAAN) desde la que sirvió al ahora dirigente nacional de la CNC, misma institución en la que estuvo cobrando como aviador, siendo secretario de Agricultura del estado de Durango.
Con el apoyo de Eladio Ramírez, saltar de puesto en puesto -siempre protegido por la red del presupuesto público- ha sido la mejor virtud de este candidato priísta a la diputación federal..

1998, el despegue de Ulises

Ulises Adame no creía que su suerte fuera buena en La Laguna de Durango, por eso, en 1998 vivía en Torreón. De hecho, como director regional de la UAAAN sus actividades las centraba en Coahuila. Desde esta Universidad, solícito siempre, estuvo apegado a las órdenes que llegasen de la CNC, principalmente del ex gobernador de Oaxaca, Eladio Ramírez.
Su apuesta como la mayoría de los priístas y los políticos de los partidos, fue esperar a que la rueda de la fortuna lo colocara en lo que los políticos consideran lo “alto”.
Por eso aquella mañana de 1998 la suerte le sonrió desde el cielo, cuando en pleno vuelo le consiguieron el nombramiento de secretario de Agricultura, tuvo que mudarse con inmenso pesar a Ciudad Lerdo.
Establecido como neofuncionario, oriundo de San Juan de Guadalupe, Durango, Ulises Adame aprovechó el resquebrajamiento del grupo de los seguidores del ex dirigente nacional cenecista, Hugo Andrés Araujo. Con el camino despejado y mediante el uso del poder presupuestal, ganó adeptos en las direcciones de los comisariados ejidales y comités regionales campesinos de la CNC del distrito XII, que en este municipio tiene el mayor número de votantes.
Con la alcaldía lerdense en manos del panista Gerardo Katsicas, Ulises Adame vendió a Guerrero Mier la idea de recuperar el municipio junto con el distrito. La visión, por supuesto, centraba en su persona la candidatura a la diputación local.
Sin contrincantes fuertes, Adame de León nuevamente fue apuntalado por el oaxaqueño Ramírez López, quien de paso utilizó la candidatura de Adame para sacudirse a los araujistas y ex diputados local y federal, Lorenzo Ponce y Jesús Molina, respectivamente.
Guerrero Mier de nuevo aceptó sin chistar la sugerencia del dirigente nacional cenecista. El apoyo del centro se volvió urgente y necesario a este gobernante apático, una vez que el PRI fue arrojado de Los Pinos en el año 2000.
Contra el gobernador de Durango seguía pesando, como hasta ahora, el estigma de haber destapado la candidatura de Francisco Labastida a la presidencia de la República. Por eso, el homicida y burlador del voto popular, Ulises Adame, abandonó disipadamente por primera vez la Secretaría de Agricultura.
Una vez ganada la diputación local, Adame de León consideró tener asegurada la presidencia de la Gran Comisión del Congreso, nombramiento que nunca tuvo, pues Octaviano Rendón Arce, miembro del grupo de Carlos Herrera, recibió del reparto esta tajada del poder estatal.
Sin fuerza, sin presencia, pero sobre todo sin disponer de presupuesto, Ulises Adame recurrió nuevamente a Eladio Ramírez para que intercediera para poder regresar a la Secretaría de Agricultura del estado. Tal como sucedió.
Los votos ciudadanos emitidos por los priístas del distrito XII local poco le importaron, como poco le interesan quienes votarán por él, el 6 de julio próximo.

La impunidad de Ulises

Hinchado de soberbia, Adame de León viajaba, hace tres años, en su Ford Lobo blanca a su natal San Juan de Guadalupe, lo hacía como secretario de Agricultura. Un vehículo de estas características en uno de los municipios más depauperados del estado, significaban para él gran estatus, símbolo de progreso, emblema de que “ya la hizo”.
Sólo que aquel día, cruzado de copas, atropelló y mató a Francisco de León, hijo de su primo.
Protegido por el indolente gobernador Guerrero Mier, este hecho se condenó al olvido. En el estado no existe quien enfrente las ilegalidades cometidas por Guerrero Mier y su gente.
Tres años han transcurrido de este homicidio doloso y los deudos del infante nunca recibieron siquiera las condolencias de este hoy candidato, por el contrario, la amenaza fue la divisa con la que detuvieron las mínimas esperanzas de justicia para esta familia sanjuanguadalupense.

Mucho currícula, grises resultados

A decir de alguna organizaciones de productores de Durango, los resultados institucionales de este candidato son un fiasco. Al margen de la publicidad y del auto alabo consignados en su díptico propagandístico, el esquema clientelar de Adame de León operó en contra de la integración mínima de las cadenas agropecuarias de producción.
Ejemplos sobran. En su momento fue denunciado por la Unión de Apicultores de La Laguna de Durango, pues Ulises Adame dispuso fuera de norma de los apoyos pírricos, como el de 40 mil pesos que estaban presupuestados para la adquisición de abejas reinas.
El desvío del dinero se cometió luego de que el presidente de la Unión de Apicultores se negó a apoyar la precampaña para la diputación local que desde esos momentos este candidato desarrollaba.
Así, con simples sellos de los comisariados y con los franqueos de las presidencias municipales de Los Altos de La Laguna, el dinero se enfocó a un fin distinto al que estaba etiquetado. Y sin importar los alcances de integración y productividad de este sector, canalizó esos montos a campesinos que comprometieran su apoyo a la futura campaña.
Las apiarios, por supuesto, no existen.

Mucha saliva, resultados negativos

Adame de León es fantasioso, como vana es la imagen del campo duranguense que desea vender. Con un campo productor de braceros, se está muy lejos de hablar de un campo integrado por rama productiva, como inventa en el díptico editado por este burlador homicida.
En la mente de Ulises Adame, en el campo duranguense no existen productores sin actividades integradas. Así, todos los campesinos que produzcan ganado o participen en cualquier rama de la agricultura, tienen su sustento y plusvalía, asegurados.
La realidad es que los montos económicos presupuestales dedicados a la agricultura en la entidad son menores cada año. Además, la evidencia del valor de la producción del campo, así como la Población Económicamente Activa (PEA) registran números decrecientes. De manera que los desvaríos de este burlador son sólo jactancias electorales en este estado, en donde las prácticas políticas son de la más rancia tradición, al igual que su gobierno.

Ulises Adame y Samuel Aguilar, oportunismos paralelos

Ulises Adame confiesa en “corto” querer superar a su paisano y actual diputado federal Samuel Aguilar Solís. Ambos encontraron el apoyo para descollar en la política en la CNC.
Aguilar Solís fue apoyado por Hugo Andrés Araujo y Maximiliano Silerio Esparza -a los que traicionó-, mientras que Adame de León encontró el apoyo del oaxaqueño Ramírez López.
Similares uno y otro, fueron diputados locales.
Aguilar Solís consiguió la presidencia de la Gran Comisión del Congreso de Durango, de allí saltó a la senaduría, y luego a su actual diputación federal, desde donde se ligó al madracismo, palanca que supuestamente lo ubica como fuerte aspirante a relevar a Guerrero Mier en la gubernatura en el año 2004.
Adame de León quiere ganar la diputación federal para desde ahí brincar a la senaduría, que, a su vez, lo “coloque” con un pie rumbo a la gubernatura del 2010 una vez que logre el apoyo de los grupos de poder en México, pero sobre todo, cuando afiance la relación con Carlos Herrera, quien se perfila como futuro diputado federal por el distrito 02 y precandidato a gobernar el estado, a partir del 2004.
Esa es la apuesta de Adame de León. Fantasiosa como su gestión al frente de la Secretaría de Agricultura.

Confusa propuesta legislativa

Como la mayoría de los candidatos, Ulises Adame mantiene una confusa propuesta legislativa, sin distinguir entre las funciones legislativas y ejecutivas, enseña su ignorancia en su díptico propagandístico.
Dice, “Si me eliges diputado trabajaré para: 1.- Que los jóvenes tengan empleos a partir de industrializar los productos que tenemos en la región. 2.- Apoyar a la autoridad local en sus programas de seguridad pública”. Y la tercera, que realmente arranca hilaridad reza: “Hacer más grandes y con más recursos los programas de las mujeres para que nos ayuden a mantener a nuestros hijos”.
Una verdadera campechana mental en cuanto al papel que tienen los poderes de la República, así como de las tareas del legislador.

El mil cachuchas

La política agropecuaria de Ulises Adame siempre se enfocó a beneficiar a los que más tienen. Engañifas como es, quiso generar una imagen de ciudadano preocupado por los problemas ecológicos de la región, pero sobre todo los concernientes al uso del agua.
Sin embargo, como funcionario autorizaba sin objetar la mayoría de los proyectos de los ganaderos lecheros de la Región Lagunera, para seguir sobre explotando los diezmados mantos freáticos.
Por otro lado, con la antípoda gorra de la organización Laguneros por el Agua A.C., que él mismo fundó, fustigaba los usos irracionales que del vital líquido se hace en la región. Pero nunca dio nombres.
Este es Ulises Adame de León, al margen del desvío de recursos que cometió para apoyar sus propias campañas proselitistas.
Homicida y diputado

Seguramente Ulises Adame ganará la diputación federal por el distrito 03, pues su contrincante más fuerte, el panista José Nahoul Porras, alias “Pepin”, está muy lejos de hacer la chica.
Con el triunfo de Adame de León, perderán los ciudadanos del distrito al igual que los duranguenses. Está visto, Ulises Adame es él, después él, solo él…
Ahora, Adame de León sólo apela a que el homicidio que cometió en la persona del niño Francisco de León quede en el olvido. El expediente del caso sigue enterrado en el archivo de la Agencia del Ministerio Público de Cuencamé, Durango, porque Ulises Adame representa el poder de la impunidad que prevalece en Durango.
Con las paradojas que construye la política nacional, con la nueva composición de la Cámara de Diputados, Ulises Adame quedará en el exhibidor político, punto desde donde se conocerán sus correrías de impunidad en este Durango.

DEJA UNA RESPUESTA

Please enter your comment!
Please enter your name here