El narco tiene permiso
El PAN vende impunidad a Valdemar Gutiérrez Fragoso

Valentín Cardona
20 de junio de 2009

Hasta el hartazgo, las campañas de los partidos políticos para tratar de ganar adeptos a sus colores se han centrado en la “lucha contra el crimen y contra las drogas”. Para ello no han escatimado recursos provenientes del erario público y por los excesos, no se podría descartar el uso de dinero sucio en esas campañas.

El partido Acción Nacional (PAN) ha mezclado sin recato las “acciones” del gobierno federal contra el crimen organizado, con sus “propuestas” de campaña. Un ejemplo entre muchos, es del promocional televisado de la medallista Iridia Salazar, quien embarazada aparece en la pantalla y con gesticulaciones que buscan convencer suelta:

“Una de las emociones más grandes que he sentido fue ganar mi medalla olímpica, pero no se compara con lo que siento ahora que voy a ser mamá. Yo quiero que mi bebé nazca en un país seguro, tranquilo, donde pueda crecer haciendo deporte y sin el peligro de las drogas, por eso yo voy a votar por el PAN para ayudar al presidente en la lucha contra la delincuencia, ¡no podemos permitir que la droga llegue a nuestros hijos!”.
Al término del espectáculo una voz en off suena: “¡no dejes a México en manos del crimen, vota PAN!”.

En abril pasado se desató una polémica sin precedente por el anuncio que el PAN hizo, de otorgar una candidatura “segura”, a diputación federal, a Valdemar Gutiérrez Fragoso, “líder” del Sindicato Nacional de Trabajadores del Seguro Social (SNTSS). Medios impresos, internet, radio y televisión recordaron a Germán Martínez los presuntos vínculos con el narcotráfico que Gutiérrez Fragoso carga sobre sus espaldas.

Y es que este hombre vendió al gobierno federal el Régimen de Jubilaciones y Pensiones, la prestación “estrella” de los trabajadores cobijados por el Contrato Colectivo de Trabajo (CCT), a cambio del silencio, el perdón y la extradición de su hijo, Israel Gutiérrez Botello, quien fue preso en España al tratar de introducir a ese país un kilogramo de cocaína, droga que llevaba el destino de ser consumida por los hijos de los españoles. Pero el gobierno español no lo permitió.

Según Gutiérrez Fragoso, “aceptó” el ofrecimiento del PAN porque se lo “pidieron las bases”. Pero de acuerdo con testimonios de trabajadores que por seguridad piden la reserva de sus nombres ante la oleada de represión instaurada por Valdemar, “el PAN ofreció impunidad a Gutiérrez Fragoso a cambio de seguir disminuyendo las prestaciones que aún le quedan al CCT”.

Para el líder de una importante corriente disidente al interior del sindicato, el síntoma del apoyo del PAN a Valdemar es de gran preocupación, pues afirma que “Acción Nacional sabe perfectamente que Valdemar no les llevará ni un solo voto, sino todo lo contrario”, y dice que la impunidad vendida a Gutierrez Fragoso carecería de sentido si no existiera el CCT”.

Agobiado no solo por el nombramiento de Gutiérrez Fragoso, sino por varios “sospechosos”, Germán Martínez, presidente del PAN, leyó en la sede de su partido la lista de los candidatos blanquiazules. Para la cuarta circunscripción nominó al primer lugar a Josefina Vázquez Mota y para el segundo a Valdemar Gutiérrez, así nada más, ni completó el apellido faltante y ni se inmutó. Dijo Martínez que los candidatos nombrados “obedecen al compromiso que he hecho de abrir el PAN a los ciudadanos”.

El 26 de abril, Roberto Gil Zuarth, representante del PAN ante el IFE acudió a ese instituto a registrar a los candidatos nombrados por Germán Martínez. En entrevista banquetera con varios medios y a pregunta expresa sobre presuntos vínculos de algunos de sus candidatos con el narco y el crimen organizado, Gil respondió que “sus candidatos están a prueba de cualquier sospecha, es gente honorable y limpios, que sabrán representar los intereses de la República”.

Una prueba más

Luego del crimen masivo aún sin castigo contra bebés y niños de corta edad en la Guardería ABC de Hermosillo Sonora, comenzaron a fluir los nombres de propietarios y funcionarios enredados en intrincadas redes de corrupción que se apropiaron de las guarderías subrogadas por el IMSS en el foxismo. En ese entonces, Santiago Levy forcejeó con el SNTSS sobre el número de Guarderías que a este le correspondían para operarlas o venderlas al mejor postor.

Plena la corrupción, un gran número de Guarderías se repartieron entre personajes influyentes, funcionarios de gobierno de todos los estados y de las redes sindicales que abarcan todo el país.

En Sonora, al igual que en otros estados de la República, Valdemar Gutiérrez incrustó a sus familiares y amigos en puestos de confianza del IMSS y de las secciones sindicales. “Prácticamente toda la parentela de Valdemar vive del IMSS y lucra en el IMSS”, afirma un exlíder del movimiento de 1989, el XXI Congreso que terminó con la caída del entonces líder Antonio Punzo Gaona.

Según el testigo, las corruptelas de toda la parentela de Valdemar siguen quedando al descubierto, como el caso del cese fulminante –el 12 de junio pasado- de Delia Irene Botello Amante, coordinadora de zona de Guarderías del IMSS en Sonora. Esta mujer, agrega, “es cuñada de Valdemar, hermana de su esposa y una de tantas que recibía sobornos para callar las condiciones de inseguridad de las guarderías sonorenses”.

“Vamos a ver que vende Gutiérrez Fragoso ahora para salvar a su cuñada”, concluye.

DEJA UNA RESPUESTA

Please enter your comment!
Please enter your name here