Corrupción e impunidad en la Ssa, prácticas recurrentes
El “Manuel Gea González” bajo la lupa

Valentín Cardona
5 de abril de 2003

Acabar con las prácticas recurrentes de corrupción e impunidad que se anidaron en las administraciones priístas fue una buena bandera utilizada por Vicente Fox en su campaña política para “sacar” al PRI de Los Pinos.
El 2 de julio de 2000, Vicente Fox lo logró, pero todas y cada una de las sucias prácticas instauradas como sistema en la administración pública federal se quedaron, de ahí el sonoro fracaso de Francisco Barrio al frente de la Secretaría de Contraloría y Desarrollo Administrativo (Secodam), a quién Fox nombró como Zar anticorrupción precisamente para erradicar esas costumbres.
Pero nada ocurrió y, al contrario, las prácticas se acentuaron.
Apenas el 31 de marzo último, Arturo González de Aragón, titular de la Auditoría Superior de la Federación (ASF), rindió su Informe de Resultados sobre las auditorías practicadas al primer año de administración foxista, el resultado fue devastador para la imagen presidencial y cayó como anillo al dedo a la oposición, sobre todo, priísta.
Y es que González de Aragón encontró “irregularidades” en la administración del “cambio” por cerca de 340 mil millones de pesos, que en contraste con los 30 mil millones de pesos detectados al último año de gobierno de Ernesto Zedillo, hicieron ver al panista, y de inmediato, como un gobierno 12 veces más corrupto que su antecesor.
Tan demoledor resultó el golpe, que al día siguiente la Presidencia de la República emitió su primer comunicado de abril, que reza de entrada:
— En seguimiento al Informe de Resultados de la Cuenta Pública 2001 presentado el día de ayer por el Auditor Superior de la Federación, el Presidente de la República ha instruido a todos los Titulares de dependencias y entidades paraestatales que fueron auditadas, a que inicien los trabajos para solventar las observaciones y atender las acciones promovidas por el órgano superior de fiscalización.
Una más, pues, de las “instrucciones” que gira Fox a su gabinete y que resulta como los “llamados a misa”, aunque para despistar, en su desesperado comunicado anuncia que los corruptos beberán sopa de su propio chocolate.
En efecto, dice en otro de sus párrafos: “los hechos individuales negativos que se llegaran a presentar serán sujetos a las sanciones correspondientes y no deberán afectar la buena marcha de las instituciones del país”.
Vicente Fox también “reconoció” el trabajo “independiente” de la ASF, quien a pesar de su “gran desempeño”, fue severamente cuestionada y puesta bajo la sospecha por un nutrido grupo de legisladores porque no encontró nada irregular sobre la operación de la Fundación “Vamos México” proyecto transexenal que preside la señora presidenta Marta Sahagún.
Y además, porque todavía “no tiene los elementos” para asegurar que en el “rancho” de Fox se hubieran empleado recursos públicos para su remodelación.

OVIEDAD DIFÍCIL

“La corrupción se ve, se siente, se huele.” comentan entre sí funcionarios dedicados a combatir ese flagelo; “¡pero es muy difícil de comprobar!”, justifican alicaídos.
Se ve, se siente y se huele en el “estilo de vida”, en los vehículos y en las propiedades que poseen los presuntos corruptos, “¡pero es muy difícil de comprobar!”.
La corrupción se sella con dinero en efectivo, que lo mismo se entrega en la oficina del funcionario, que en un café o sobre un vehículo. Es el resultado del pago de una “ayuda” para salir favorecido en una licitación pública, y ni se diga en las famosas adjudicaciones directas, en las que casi siempre se evaden las responsabilidades a que están sujetos por ley, tanto comprador como proveedor.
Ahí está, se ve, se siente, se huele. “¡pero es muy difícil de comprobar!”
En el colmo, hay proveedores contratados que “no existen”, es decir, carecen de domicilio fijo, y no cuentan siquiera con el registro ante Hacienda. Sin embargo, se hacen de jugosos contratos en los más diversos entes de la administración pública federal, cotizan a sobreprecios y, aun así, ganan. Algunos cumplen parcialmente, luego desaparecen. “¡pero es muy difícil de comprobar!”
Casos en los que se dan los supuestos anteriores, y muchos, fueron detectados por la ASF en el ejercicio al presupuesto del primer año de gobierno foxista. Las irregularidades en el manejo de los recursos sumaron casi un tercio del presupuesto total que el gobierno federal ejerció en el 2001.
Un ente auditado por la ASF refleja aspectos donde la corrupción se ve, se siente y se huele, pero que seguramente será muy difícil de comprobar. Y más si se considera que, para su suerte, los involucrados en “recurrentes irregularidades” contarán con 45 días para “solventar” -como dijo Fox-, las irregularidades administrativas a partir de que la ASF los notifique.
Se trata del Hospital General “Dr. Manuel Gea González”, dependiente de la Secretaría de Salud.
En efecto, la ASF auditó, entre otros, los gastos de la partida 4302, correspondiente a la “Transferencia para Adquisición de Materiales y Suministros” en donde la Dirección de Administración (DA) del hospital ejerció 64 millones 859 mil pesos. De esa cantidad, la ASF revisó 14 casos en los que se aplicaron 11 millones 234 mil pesos, es decir, sólo el 17.3 por ciento del monto total gastado en adquisiciones.
Y en los 14 casos, que se muestran en las gráficas a continuación, la ASF encontró un verdadero mugrero:

 

MUESTRA REVISADA
(Miles de pesos)

Partida
Concepto
Presupuesto ejercido
Presupuesto revisado
Porcentaje
2301 Refacciones,Accesorios y Herramientas 1,117.30 607.4 54.4
2502 Sustancias Químicas 13,868.20 7,701.70 55.5
2504 Medicinas y Productos Farmacéuticos 32,168.20 1,101.80 3.4
2505 Materiales, Accesorios y Suministros Médicos 11,292.40 916.5 8.1
2701 Vestuario, Uniformes y Blancos 1,646.30 906.6 55.1
Total 11,234.00
FUENTE: Pólizas cheques.

 

POR TIPO DE ADJUDICACIÓN REVISADA
Muestra revisada (Miles de Pesos)

Proceso de adjudicación
Núm. de pedido
Núm. de Procedimiento
Proveedor
Importe revisado
Licitación Púb. Int. 1275 LPI 12195002-004-01 Distrib. Científico Pallach 1,677.50
  1276   Biomerieux México 1,243.10
  1278 y 2452   Beckman Coulter de México 3,776.80
Excepción a L.P. 691 3a. Sesión Ordinaria Tecnomed Internacional 435.40
  1285 y 1451   Abbott Laboratories de México 916.5
Excepción a L.P. 1271 6a. Sesión Ordinaria Medidores Ind y Médicos 568.8
  2352 11a Sesión Orinaría Astrazeneca, SÁ. de CV 502
  2449   Ralca, S.A. de C.V. 599.9
Licitación Púb. Nac. 2487 LP-12195003-001-01 Uniformes Empresariales 398.9
  2488   Uniformes Mont Blanc 251.8
  2489   Acha Julio Salvador 255.8
Excepción a L.P. 1808 4a Sesión Ext. Electrónica y Medicina 607.4
TOTAL 11,234.00
Fuente: Expedientes de Adjudicación

EL MUGRERO

De acuerdo con el Informe de Resultados de la Revisión que realizó la ASF -en poder de Imagen Médica- luego del “análisis de los procesos de adjudicación” la ASF comprobó que:
— la DA del ente fiscalizado no remitió al Órgano Interno de Control el informe ni el dictamen de los procedimientos de adjudicación directa por excepción a licitación pública, y en el caso particular de la adjudicación celebrada en la 4ª Sesión Extraordinaria, no se contó con el oficio de suficiencia presupuestal.
— El almacén general del hospital, recibió sustancias químicas sin contar con el pedido o contrato previo.
Pero además, del “análisis de los pedidos” la ASF constató que:
— Se celebraron 14 pedidos con los proveedores. sin embargo, se formalizaron después de los plazos establecidos.
— Los pagos de los compromisos pactados en los 14 pedidos se realizaron después de haber recibido los insumos. sin embargo, las sustancias químicas adquiridas en siete pedidos, se entregaron después del plazo establecido, sin que se aplicara la sanción correspondiente.
Y de los análisis, la ASF pasó a las observaciones:
— Se comprobó que la DA no remitió al Órgano Interno de Control en la entidad fiscalizada el informe ni el dictamen correspondiente a los contratos adjudicados de manera directa por excepción a licitación celebrados con los pedidos 1271, 1808, 691, 1285, 1451, 2352 y 2449, por 3 millones 630 mil pesos, en incumplimiento del artículo 40, párrafo segundo de la Ley de Adquisiciones, Arrendamientos y Servicios del Sector Público.
Cabe hacer mención de que este tipo de irregularidad se presentó durante la revisión del ejercicio de 1997, efectuada por la entonces Contaduría Mayor de Hacienda, por lo que se considera que existe un incumplimiento a las instrucciones que giran las autoridades superiores de la entidad fiscalizada.
— Se constató que la adjudicación directa del pedido 1808 por 607.4 miles de pesos celebrada por excepción a licitación con el proveedor Electrónica y Medicina S.A., no contó con el oficio de suficiencia presupuestal, y en la licitación pública internacional 12195002-004-01 el oficio de solicitud de suficiencia presupuestal se regularizó con el oficio núm. RISAI21212001 del 7 de mayo de 2001, en incumplimiento del artículo 25 de la Ley de Adquisiciones, Arrendamientos y Servicios del Sector Público.
— El Comité de Adquisiciones, Arrendamientos y Servicios (CAAS) autorizó la adjudicación directa por excepción a licitación de los pedidos 2352 y 2449, por un millón 101 mil 800 pesos, los proveedores Astrazeneca S.A. de C.V. y Ralca S.A. de C.V, en virtud de que se presentó al CAAS la justificación de que el hospital pudiera tener pérdidas o costos adicionales importantes, debido a la falta de existencias en el almacén de la farmacia para el mes de noviembre del 2001, de los productos Propofol de 200 mg y Midazolam de 15 mg, situación que al verificar el registro de los inventarios se conoció que el almacén en los meses de octubre y noviembre contaba con existencia de estos medicamentos.
— 7 de los 14 pedidos adjudicados, por 7 millones 636 mil 900 pesos fueron formalizados por los proveedores hasta 161 días después del plazo establecido, en tanto que el pedido 1808, por 607 mil 400 pesos, no fue formalizado por el proveedor Electrónica y Medicina S.A., lo que ocasiona que se pierda la posibilidad de aplicar las penas convencionales a los proveedores por el incumplimiento en las entregas de las mercancías en los plazos establecidos en los pedidos o que se incurra en gastos innecesarios para el hospital al establecer compromisos sin la debida formalización, en incumplimiento del artículo 46 de la Ley de Adquisiciones, Arrendamientos y Servicios del Sector Público.
— Se detectó que las sustancias químicas y los medicamentos adquiridos se entregaron con retraso, sin que se aplicaran las sanciones por 109 mil 300 pesos, en incumplimiento de lo establecido en el pedido y en el artículo 46 de la Ley de Adquisiciones, Arrendamientos y Servicios del Sector Público.
Se constató que en el caso del proveedor Distribuidora Científica Pallach S.A., de C.V., se debió hacer efectiva la fianza, ya que el monto de la sanción, de 309 mil pesos, rebasa el 10 por ciento del importe de la fianza de cumplimiento, que fue de 145 mil 800 pesos.
— Se constató que la fianza de cumplimiento del pedido 1271 se presentó 21 días después del plazo establecido, en tanto que la correspondiente al pedido 1808, por 607 mil 400 pesos, no fue exigida al proveedor, lo que pone en riesgo de no garantizar los compromisos pactados, en incumplimiento del artículo 45 de la Ley de Adquisiciones, Arrendamientos y Servicios del Sector Público.
— Mediante el oficio sin número del 7 de noviembre de 2001 del proveedor Abbott Laboratories S.A., la DA recibió medicamentos en calidad de donación por 481 mil 800 pesos, que registró como un pasivo pendiente de pago, y mantuvo los recursos durante 11 meses en su flujo de efectivo, hasta el mes de octubre de 2002, fecha en que efectuó el entero a la TESOFE como efecto de la revisión, en incumplimiento del articulo 69 del Presupuesto de Egresos de la Federación para el ejercicio 2001.

LAS ACCIONES

Luego de analizar los procesos de adjudicación y los pedidos y, de hacer las observaciones pertinentes, la ASF pasó a las “acciones”, consistentes en tres solicitudes al Órgano Interno de Control (Contraloría Interna) del Hospital General “Manuel Gea González”, para que considere, en uso de sus atribuciones, iniciar el procedimiento administrativo correspondiente a los siguientes casos:
— . dado que la Dirección de Administración del hospital presentó irregularidades recurrentes toda vez que se comprobó que no remitió al Órgano Interno de Control en la entidad fiscalizada el informe ni el dictamen correspondientes a los concursos por adjudicación directa por excepción a licitación formalizados con los pedidos 1271, 1808, 691, 1285, 1451, 2352 y 2449, por 3 millones 630 mil pesos; y por el pedido 1808, por 607 mil 400 pesos, que no fue formalizado por el proveedor Electrónica y Medicina, S.A.
— . en relación con el hecho que la Dirección de Administración de la entidad fiscalizada no aplicó a los proveedores las sanciones a que se hicieron acreedores por incumplimiento en las entregas de los materiales, ya que en el caso de Distribuidora Científica Pallach S.A de C.V., se debió hacer efectiva la fianza, ya que el monto de la sanción de 309 mil pesos, rebasa el 10 por ciento del importe de la fianza de cumplimiento, que fue de 145 mil 800 pesos, en tanto que los cuatro restantes no se les solicitó el pago de las sanciones de 109 mil 300 pesos.
— . en relación con el hecho de que la Dirección de Administración de la entidad fiscalizada, informó al Comité de Adquisiciones, Arrendamientos y Servicios, la no existencia de dos medicamentos, lo que ocasionó que éste autorizara indebidamente la adjudicación directa por excepción a licitación de los pedidos 2352 y 2449 por un millón 101 mil 800 pesos celebrada con los proveedores Astrazeneca S.A. de C.V. y Ralca S.A. de C.V., y para que determine lo correspondiente al registro indebido de 481 mil 400 pesos por concepto de medicamentos donados por el proveedor Abbott Laboratories S.A., recursos que la citada dirección provisionó como pasivo y mantuvo durante once meses sin realizar el reintegro correspondiente.
En los tres casos, la ASF solicita a la Contraloría Interna que le informe de los resultados obtenidos.

DEJA UNA RESPUESTA

Please enter your comment!
Please enter your name here