PRESENTACION DEL LIBRO EL IMSS BAJO EL CALDERONISMO. 2007. EL PLIEGO HOSTIL DE MOLINAR HORCASITAS
¿Por qué no van a mejorar los servicios que presta el IMSS con Calderón?
Gustavo Leal F.
31 DE JULIO DE 2008

1.- Quiero agradecer al grupo de personas que hicieron posible esta publicación.
2.- Y por supuesto que espero que esta presentación se traduzca, muy pronto, en un Plan de Acción preciso para poner al servicio de la derechohabiencia y las grandes mayorías nacionales los cuantiosos recursos de que dispone esa noble institución llamada IMSS que han venido siendo muy interesadamente administrados por Zedillo, Fox y Calderón.
3.- Este libro trata de algunos de los por qué no van a mejorar los servicios que presta el IMSS -particularmente los médicos, que constituyen su columna vertebral- durante el gobierno de Calderón.
4.- El primer por qué deriva del simple hecho de que -como Fox y Levy- Calderón y Molinar Horcasitas extendieron cómodamente y sin asomarse siquiera a las tripas de los proceso de atención- el deliberadamente equivocado “diagnóstico” del primer gobierno panista que desprestigiaba a sus trabajadores, su CCT, acotaba prestaciones, cancelaba servicios y ponía al Instituto al servicio de los patrones y no de los derechohabientes.
En una palabra: los servicios no mejorarán, porque como antes Zedillo y después Fox, la alianza de intereses que sentó a Calderón en la titularidad del Poder Ejecutivo, no quiere y no le interesa que el IMSS mejore. Lo que quiere es otra cosa: es usar sus bolsas de recursos públicos para financiar establecimientos privados. Y en esa ruta avanza la continuidad calderonista con su empresarialismo, tal y como se aprecia en el fallido Programa del Primer Empleo.
5.- El segundo por qué se refiere al Partido Acción Nacional como partido en el poder desde el año 2000. Después de ocho años, 6 de Fox y casi 2 de Calderón, está claro que se trata de un instituto político incapaz de vertebrar una alternativa moderna para vincular su política macroeconómica -que sigue siendo la misma que diseñaron los tecnócratas priístas de Zedillo- con alguna política social -que sigue siendo la misma que diseñaron los priístas de Zedillo y extendió Fox.
Estrictamente hablando el maridaje PAN-PRI empieza a comportarse de acuerdo al sueño colonizado de Carlos Salinas de Gortari: la vigencia de un sistema bipartidista dotado de un par de institutos que se reparten “alternadamente” la titularidad del Ejecutivo a imagen y semejanza de lo que sucede en los EUA.
Con la misma política económica de la tecnocracia priísta y con una poco alentadora recaudación al interior del segundo gran recaudador nacional que es el IMSS, el PAN es incapaz de hacer crecer la economía, generar empleo formal y con ello elevar la protección social que garantiza la Ley del IMSS. El PAN es incapaz de vincular su propuesta económica a los sectores de punta y avanzados de la economía global. Es un partido que administra políticamente la renta que les permita extraer a los monopolios que se enseñorean sobre la economía mexicana: bancos, telecomunicaciones, medios de comunicación y distribuidoras agrícolas entre muchos otros.
EL PAN es un partido dominado por la derecha política tradicionalista y ultramontana que representa Fox con una pobre presencia de una derecha calderonista sin eje, discurso y propuesta propia, pero empresarialista y clientelar. El PAN es un partido que está partido. Ese PAN partido entre ultramontanos y derecha sin propuesta es el responsable de que los servicios del IMSS vayan a peor con Calderón y el histriónico Horcasitas.
6.- El tercer por qué guarda relación con la naturaleza de la presencia política del actual CEN y su correspondiente estructura del enorme SNTSS: 37 secciones, 380 mil activos y 160 mil jubilados y pensionados.
Cabe aclarar que, estrictamente, éstos últimos no están asociados al Sindicato por su carácter de extrabajadores. Pero, hasta ahora, el Sindicato ha preservado su compromiso con ellos. Sobre todo por la autoridad técnica y moral que aportan a los trabajadores activos.
 Esta cúpula sindical aún debe consultar a sus representados respecto a las decisiones que han tomado a sus espaldas y desde su propia toma de posesión (octubre de 2006). Ella se autofacultó para decidir sin consultar a sus representados y aún debe rendir cuentas.
Esta cúpula sindical, ayuna de propuesta propia -pero dispuesta a adoptar los programas médicos calderonistas que ha impuesto en el IMSS la visión del Banco Mundial que porta el Dr. Santiago Echevarría Zuno (seguro para los recién nacidos, DIABETIMSS, estímulo a la eficiencia y productividad) o los esquemas de pensiones que les han diseñado los tecnócratas hacendarios para hundir como en el caso de la “reforma” calderonista del ISSSTE a los trabajadores de nuevo ingreso- vive de sus representados pero no tiene depositado su interés principal en ellos.
Lo que la ocupa básicamente es la administración neocorporativa y clientelar (automóviles y vivienda para los activos) de las cuantiosas cuotas de sus representados para intentar incursionar en los procesos electorales venideros bajo un esquema similar al que hoy activa al SNTE de Elba Esther Gordillo.
         El actual CEN del SNTSS y su estructura representa una restauración neocorporativa postpriísta después del veranillo democrático que inició la secretaría general a cargo del Dr. Miguel Ángel Sáenz Garza y que culminó con el Convenio Adicional signado por el Dr. Roberto Vega Galina, sus asesores jurídicos y actuariales en octubre de 2005.
No hay que engañarse: no hay 2007 sin 2005, no hay Gutiérrez Fragoso sin Vega Galina, del cual fue secretario del interior. Esa cúpula del SNTSS garantizó no sacar a los trabajadores a la calle frente a la “reforma” calderonsita del ISSSTE que ya anticipaba la suerte que padecerían todos los de nuevo ingreso al IMSS y que Calderón, los tecnócratas hacendarios y Gutiérrez Fragoso firmaron el 14 de julio de 2008.
Hasta el momento, no hay un solo pronunciamiento del actual CEN sobre el fallo de la SCJN que desechó el 12 de marzo de 2007 la demanda interpuesta por el SNTSS frente a las reformas Beltrones-Levy del 11 de agosto de 2004.
Sobre ese CEN pende la viabilidad del proyecto derechista de Calderón que no busca mejorar los servicios institucionales y es ya corresponsable del destino, merma, minusvalía de los fondos pensionarios de los trabajadores de nuevo ingresos y que ese CEN ha permitido que pasen a manos de las Afores.
El destino democrático del SNTSS está pues ante una encrucijada. Y hoy como en 2005, o en 1989, son los trabajadores y su compromiso efectivo con la derechohabiencia los que tendrán la última palabra.
7.- Por estos tres por qués no van a mejorar los servicios del IMSS con Calderón. Y de ellos eso se ocupa el libro que hoy nos reúne, tematizando un cuadro integral de los servicios institucionales: finanzas, incorporación y recaudación , rentas vitalicias, prestaciones médicas y económicas, jornaleros agrícolas, entre otros.
8.- Algo es inmediatamente claro: con la firma del Convenio 2005 y el de 2008 relativo al régimen para los de nuevo ingreso, el IMSS de Calderón y Horcasitas han perdido ya el pretexto financiero de que abusaron Fox y Levy. No les queda más que recurrir a otros pretextos. ¿Cuáles? Ya están a la vista, ahora, los gastos médicos para pensionados y las guarderías.
Agotados los pretextos tecnocráticos: el RJP, el CCT, los gastos médicos para pensionados, brota como en el caso de PEMEX la verdad sistemáticamente ocultada y escamoteada por Zedillo, Fox y ahora Calderón sobre la situación de los servicios: las administraciones institucionales priístas y panistas. Que ahora caminan hacia una clara tendencia: subrogar servicios amparados en la Ley General de Salud (reglamento del Seguro Popular) y la portabilidad de la cobertura (artículos 141 y 142) de la impugnada Nueva Ley del ISSSTE.
         9.- Es evidente que este futuro no es admisible y lo interesante es lo que ya surge frente a la mediocre continuidad calderonista. Las jornadas por la defensa de la seguridad social del ISSSTE y el golpeo mediático sobre el IMSS y sus trabajadores han ubicado el asunto de la salud y la seguridad social entre una de las primeras prioridades de la agenda pública.
10.- El debate sobre el destino de la salud y la seguridad social de los mexicanos apenas empieza. Sigue fortalecerlo, dilatarlo, difundirlo. Sigue mostrar sistemáticamente con datos precisos, cuantas veces sea necesario, que hasta ahora son la gran mayoría de los trabajadores los que van, poco a poco, perdiendo derechos adquiridos. Vivimos rodeados de esa gran regresión laboral
Sigue pues tener paciencia y no precipitarse aguardando resultados inmediatos y espectaculares. El debate sobre esta crucial política pública está encontrado sus tiempos. Y son ellos los que deben ser sostenidos en la agenda nacional, ganando a la opinión pública víctima de las huecas campañas mediáticas oficiales. 
11.- Finalmente. Es un hecho que el pacto nacional-popular que estructuró al régimen revolucionario se quebró hace bastante tiempo. Está roto y desmoronado. Lo que ha surgido y parece irlo sustituyendo gradualmente es un presidencialismo empresarialista y antilaboral: Zedillo con el IMSS, Fox con el fraudulento Seguro Popular, Calderón con el ISSSTE. No sólo no es popular: no le interesa serlo. Es un presidencialismo al servicio de intereses precisos que pretende someter la entera institucionalidad republicana. El proyecto vertebrado de derecha de Calderón no puede hablar por la Nación.
La regresión laboral mundial y mexicana en el marco global es el tema. Hay que hablar sobre el asunto, tratarlo, ocuparse de sus contenidos para modificarlos, para actuar sobre y contra ella. Para modularla. Pero sobretodo, hay que desmontarle el intocable lugar, el pedestal de reverencias al que la han interesadamente erguido los tecnócratas que buscan para sostener a toda costa el actual estado de cosas y secuestrarla para el proyecto de derecha de Calderón.

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